Cuando media hora después de las 11 de la noche , Bomvivant hizo sonar los primeros acordes, el clima empezó a formarse. Con un performance basada en el blues clásico, la banda hizo un show de 45 minutos intensos.
Apoyados en la voz del cantante, Bomvivant, con una formación tradicional presentó temas de sus 4 discos. Promediando el show, el tema de James Brown I feel good, arreglado para adecuarse al Blues de la banda inundo todo el local. Para terminar su sólida actuación se despidieron entre aplausos de un público que sabía que el plato principal de la noche estaba por venir.
Cerca de la media noche subió al escenario Sindicato Porteño. Con una formación de 9 integrantes, compuesta por Charly Agrech (Voz), Nono López (Guitarra líder), Pablo Lagreca (Guitarra rítmica), Silvio Marzolini (Teclados), Nicolás Lagreca (Bajo), Hernán Benedetti (Batería), José Fisu Azpiazu (Saxo tenor), Leo Longhi (Trompeta), Rodrigo Martinez (Trombón).
La banda se aleja del Blues tradicional y bucea en diferentes estilos que van desde el rock clásico hasta el reggae. En el escenario se mueven como si fuese su hábitat natural. Por sobre su excelencia como músicos y la calidad de sus interpretaciones la banda se destaca por su actitud. Enfrentan al público sabiéndose virtuosos y dueños de un sonido impecable que invita a querer volver a oírlos.
Pasando por temas pr opios com Pasao Sin anillos, Captura recomendada, Reina del Sur, la banda desplegó todo su histrionismo y logró un momento mágico en la noche con una invitada especial. Floppy, que subió al escenario con una aparente timidez que despejo enseguida con el primer sonido de su voz. Una excelente interpretación del tema de Pappo, Desconfío, hizo que la función brillara. Después quedo tiempo para unos bises y para más aplausos.
Finalmente pasada la 1 de la mañana la velada se cerró con el tema El Cocolizo y Sindicato Porteño se fue ovacionado dejando en el público un sabor a buena música y un clima de fiesta que El Ciudadano supo agasajar a la perfección.
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